Con motivo del «Día Europeo de la Celiaquía y la Sensibilidad al Gluten» que se celebra el 16 de Mayo, os presentamos las cuestiones más importantes a tener en cuenta en la vida escolar, de cara a las personas celiacas:
El niño celíaco debe saber que es celíaco.
Por muy pequeños que sean, los niños debe saber en la medida de su entendimiento, que es la celiaquía y que supone para ellos. Aunque pensemos que son pequeños, los niños tienen una capacidad de comprensión asombrosa y por tanto, cuanto más les expliquemos de forma sencilla que no pueden comer ciertos alimentos y porqué, más lo integraran en sus cabecitas, lo asimilarán y será parte de su esencia.
La información es clave para que ellos sepan decir «NO» o al menos, duden ante algo que no tengan claro.
Se trata de su salud y parte de ellos mismos, por muy pequeños que sean.
El tutor y profesores deben saber que hay niños celiacos y qué supone
El tutor y todos los profesores del niño deben saber que es la celiaquía y deben colaborar estrechamente en que el niño nunca se sienta excluido debido a su enfermedad. También es importante que en clase haya algún tipo de comida apta sin gluten para situaciones imprevistas que se puedan producir como cumpleaños, actividades con alimentos, etc.
Cuando los niños son pequeños y si es posible, es importante solicitar un listado con las fechas de cumpleaños de los compañeros de clase del niño. De esa manera como padres, nos aseguramos de que el celíaco lleve también algo especial (llevado por nosotros en general). Los profesores deben saber además que no vale con dar comida sin gluten a los niños celíacos, sino que además hay que extremar el cuidado con la contaminación cruzada: una mínima traza de gluten contaminará la comida sin gluten y hará enfermar a los pequeños.
Informar al resto de los compañeros
Igual que nuestro hijo entiende que es la celiaquía, el resto de pequeños también debe saberlo. Una pequeña charla con un cuento, mediante dibujos… se puede explicar de forma muy sencilla lo que es la enfermedad celiaca.
Y es curioso en entendimiento y empatía que tienen los más pequeños y lo que se suelen preocupar porque tal o cual niño tenga comida apta.
Excursiones/salidas del cole/fiestas con comida en el colegio
Aquí lo ideal es que se acuerde que un menú o una comida que sea apta para todos. Eso es inclusión. Por desgracia, es un punto complicado y más de una vez veremos que el niño celiaco ha estado apartado de todos con el consiguiente disgusto. Ya no es que se sientan «diferentes», es que se sienten excluidos. Ante esto, solo podemos recomendar información, tranquilidad y concienciación.
Comedor escolar
Ante el aumento de diagnóstico de niños celiacos, creo que la mayoría de los servicios de catering o de los comedores escolares, están preparados para ofrecer menús sin gluten a nuestros niños.
Se supone que deben estar formados e informados en ello. Es fundamental que los niños celiacos puedan comer, en un alto porcentaje, lo mismo que sus compañeros: unas judías verdes con patata son sin gluten; un filete empanado se puede hacer con pan rallado sin gluten; y para un arroz a la cubana, se busca un tomate frito apto para todos y listo.
Y cuando esto no sea posible, deben procurar que los niños celiacos tengan un sustituto lo más similar posible. Con respecto a dónde sentar a los niños en el comedor, ahí tenemos diferentes versiones: hay a quien le gusta que sus hijos celiacos (o con otras enfermedades o alergias alimentarias…) se sienten separados del resto por seguridad. Personalmente nosotros desde la asociación recomendamos que si se enseña y se informa a los demás, lo mejor es que se siente con el resto de sus compañeros y que nunca sienta que por ser celíaco, no puede comer con los demás. Pero es elección de cada familia, por supuesto.
Material escolar
Es una preocupación, especialmente para los papás de niños más pequeños ya que aún se llevan muchas cosas a la boca. Plastilina, temperas y otros materiales pueden suscitar dudas, así que es importante que se mire el listado de ingredientes que los componen. Afortunadamente cada vez más se fabrican utensilios de este tipo sin ningún tipo de alérgenos alimentarios y marcas como Jovi o Alpino elaboran plastilinas sin gluten. Lo más importante es informar bien a los profesores para que estos sepan cómo tratar a nuestro pequeño celiaco.
Implicación del resto de familias
Tal vez uno de los puntos más complicados. Como padres, es difícil ir a un cumpleaños al que han invitado a tu hijo y encontrarte con que apenas puede comer nada o casi nada. Y eso para un pequeño, es muy, muy duro. Hay que hablar con el resto de familias, tratar de explicarles lo que implica ser celíaco (no solo la comida sino la contaminación cruzada) y procurar que se impliquen en ello.
Si no, siempre nos queda la opción de llevarles nosotros como padres algo para que el niño pueda comer y no se sienta excluido.
